Jul 01 , 2020
¿Cuáles son los riesgos que se corren al aplazar la visita al dentista por evitar el virus?
Tras seis meses en los que el mundo ha convivido con el COVID-19, se comienza a instaurar una nueva normalidad en la que retomar algunos servicios odontológicos es posible, pero muchos de los pacientes tienen miedo de asistir a sus citas, pues el riesgo de contagio sigue latente.
Adicional a la problemática, siempre se ha presentado temor en las personas por acudir al odontólogo, para muchos los procedimientos suelen ser dolorosos e incómodos. Acá es donde debemos recordarle a nuestros pacientes la importancia de seguir asistiendo y no dejar de lado los tratamientos que ya habían avanzado, pues esto también representa un riesgo para la salud.
Gaceta Dental Realizó una entrevista al Dr. Ferrús, periodoncista y cofundador de la Clínica Dental Ferrus & Bratos de Madrid, en esta entrevista el da a conocer algunos de los puntos que debes resaltarle a tus pacientes para que tomen la decisión de continuar sus procedimientos.
El cuidado de las encías es la nueva normalidad
Por lo general nuestros pacientes creen que el cuidado oral se debe exclusivamente a los dientes y por este motivo muchos olvidan las encías, que también tienen una importancia alta. Mantener unas encías sanas aportará a la estética y a la base de los dientes.
Respecto a la salud de las encías, el doctor Ferrús incide sobre los principales problemas que conviene abordar en las etapas iniciales: “Si comenzamos a notar sangrado durante el cepillado o inflamación en el tejido gingival, es probable que estemos ante un claro indicio de gingivitis”.
Muchos piensan que este no es un signo de alarma, pero hay que tener en cuenta que las enfermedades periodontales no dejan de avanzar y entre más tarde el paciente en acudir, mayor será el problema al que el profesional de salud oral debe enfrentarse.
Es por este motivo que cuando se evita una cita al odontólogo, el paciente puede terminar en largos tratamientos, con pérdidas económicas y de salud.
“Mientras que la gingivitis puede frenarse a través de una higiene profesional, cuando las bacterias alcanzan el interior de la mucosa gingival ya se requiere de un tratamiento específico realizado por un especialista en Periodoncia”, añade Jorge Ferrús.
Problemáticas más graves que la caries
Por el tiempo que todos hemos estado en confinamiento y con las diferentes problemáticas que se han presentado frente a la pandemia, es muy posible que las personas hayan descuidado la limpieza oral, el estar en casa todo el día puede acarrear que las personas no se cepillen los dientes. Esto se traduce en acumulación de placa y mientras se forma la lesión cariosa es posible que las personas no noten más que una simple sensibilidad en los dientes que a futuro será un problema grave.
“Es importante ser conscientes de que las caries, al igual que cualquier otra enfermedad bucodental, comienza con síntomas muy leves o apenas apreciables. Pero es el tiempo el que juega una mala pasada en caso de no abordar el problema a tiempo. Así, una caries no tratada, puede requerir de otros tratamientos más exhaustivos que un mero empaste, como una endodoncia”, incide Ferrús.
El odontólogo completa la higiene
La limpieza oral no se limita exclusivamente al cepillado, el uso de la seda dental y el enjuague bucal debe ser estricto.
“Esta práctica evita, en gran medida, la mayoría de enfermedades bucales producidas por la acumulación de placa y sarro -halitosis, enfermedades periodontales o caries, entre otras-. Pero, como especialistas, siempre recomendamos realizar una profilaxis en clínica cada 8 o 10 meses. Sin embargo, la higiene debería ser cada 4 o 6 meses en caso de pacientes con problemas periodontales”, explica Jorge Ferrús.
Ir a tiempo a las citas odontológicas siempre será la mejor manera de eliminar cualquier rastro que se nos haya escapado en nuestro proceso de limpieza, confiar en los profesionales de la salud oral nos puede ahorrar muchos dolores de cabeza.
Los consultorios odontológicos siempre han sido lugares antisépticos
Como en una clínica dental se realizan procedimientos altamente complejos, esta siempre debe estar limpia y desinfectada, no se trata del virus, estos espacios siempre han sido seguros. Las clínicas dentales siempre han tenido estrictos protocolos de bioseguridad.
“Esta ya era una realidad antes del inicio de la pandemia, pero siguiendo las recomendaciones marcadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Colegio Oficial de Odontólogos de Madrid (COEM), las medidas de higiene y distancia entre personas se han acentuado notablemente en nuestra clínica”, aclara el doctor Ferrús. Así, cada dentista lleva sus propios EPIs (equipos de protección individual), no solo para protegerse, sino para evitar cualquier contagio accidental con los pacientes: mascarilla quirúrgica y FFP2, pantalla facial protectora, guantes, batas quirúrgicas lavables y gorros.
En estos momentos es compresible el miedo que todos podemos tener al salir de casa, pero es importante saber que hay muchas más enfermedades que tendremos que enfrentar si no asistimos a tiempo a una consulta.
Fuente: Gaceta Dental